Cruceros por Marsella (Provenza), Francia

• Catedral de la Major: La basílica de Santa María la Mayor es un imponente edificio que mezcla estilos románicos y bizantino en uno. La Catedral de la Mayor es única en su estilo en toda Francia y un buen punto de partida en cualquier lista de lugares a visitar en Marsella.
• Basílica de Notre Dame de la Garde: ¡Considerada una de las más bonitas! Lo único desagradable es que para llegar a ella hay que tener ganas de caminar. Debido a que se encuentra en lo alto de una colina. Si bien, hay autobuses que suben, muchas personas suelen ir caminando. La basilica es de estilo neo-bizantino y está coronada por una imagen de la Virgen María que se ve desde cualquier punto de la ciudad.  
• MuCEM: El Museo de las civilizaciones de Europa y del Mediterráneo, o MuCEM, fue inaugurado el 2013, año en que Marsella fue capital europea de la cultura, y es el símbolo de la regeneración del frente marítimo de la segunda ciudad de Francia. En caso de no tener mucho tiempo para recorrerlo, te sugerimos que subas por las escaleras que lo rodean hasta llegar a la terraza, y disfruta de las vistas. Cuando termines, cruza la pasarela que lo une con el Fuerte Saint- Jean y sigue paseando. Muy cerca de este edificio, se encuentran otros de arquitectura contemporánea como la Villa Mediterranée y el FRAC que también deberías admirar.
• Fort Saint- Jean: Descubre el bastión que el rey Luis XIV levantó en la entrada del Puerto Viejo. Podrás disfrutar de terrazas, de la buena vista y observar alguna que otra escultura interesante.
• Barrio Le Panier: Considerado antiguamente como un barrio de mala reputación, hoy Le Panier es uno de los lugares que ver en Marsella. El corazón histórico de la ciudad, podrás observar el arte urbano, tiendas de diseño, cafeterías y vivir la ciudad en pleno.
• Puerto Viejo: Es una de las mejores cosas que ver en Marsella. Encontrarás puestos de pescados y mariscos que se encuentran todo el año, donde te asegurarán los mismos pescadores de la frescura de sus productos.
• Castillo de If: Corresponde a una preciosa fortaleza reconvertida en cárcel que data del siglo XV, utilizada con ese fin hasta el siglo XIX. Dicen que en ella se inspiró Alexander Dumas para escribir “El Conde de Montecristo”. Desde el puerto de Marsella, salen varios barcos hacia la isla. Los precios fluctúan entre 11€ el transporte y 5€ la entrada al castillo aproximadamente.  
• Palacio del Pharo: Antigua Facultad de Medicina, el Palais du Pharo es ahora el centro de convenciones. Está rodeado de jardines los cuales están abierto al público de 8 a 21 horas. Desde acá se puede apreciar una espléndida vista al Puerto Viejo y la parte norte de la ciudad.
• Valle Auffes: Es un pequeño y pintoresco puerto con coloridas embarcaciones con pescadores apretados unos contra otros en la Corniche en Marsella. Este valle es una verdadera postal de Marsella, está situada en el distrito 7, y está dominada por el viaducto de cornisa.

• Parque Borély: Es el parque más visitado en Marsella. Lo visitan familiar y parejas quienes pueden practicar deportes en él. Este parque cuenta con 17 hectáreas divididas en el jardín de las rosas o el parque infantil, por nombrar algunas. Para los amantes de la naturaleza, todos los árboles cuentan con sus nombres originales y, además, es posible arrendar un bote para dar un paseo por la laguna donde podrás contemplar a los patos que nadan en él. El romance y la relajación se apoderan de este lugar.
• Stade Vélodrome: Las palabras “L´Olympique de Marseille” pone los pelos de punta a los amantes del futbol. Si eres un amante de esta actividad, debes conocer este estadio.
• Surf: Si eres amante de esta adrenalínica actividad, te recomendamos que lo hagas en la Playa del l´Huveaune, donde encontrarás las mejores olas para surfear.
• Segway: Si buscas recorrer la ciudad de una manera más entretenida, te recomendamos que lo hagas arriba de los vehículos que están de moda. El segway son vehículos sobre dos ruedas fáciles de manejar que permite que cualquier persona pueda conducirlo, la diversión que aporta y la rapidez que suma a los desplazamientos. ¡Lejos es la mejor manera de recorrer la ciudad!
• Andar en bicicleta: Una de las actividades al aire libre, es recorrer la hermosa ciudad de marsella en bicicleta. También las hay electrónicas. Ambas, te darán una visión distinta en tu paseo por esta región.
• Buceo/ Snorquel: Si eres amante de este entretenido deporte, te contamos que en las costas es posible realizar estos deportes acuáticos. Hay monitores quienes te guiarán en esta gran aventura. 

La gastronomía de Provenza es mediterránea. Es decir, es una cocina sana, sencilla y natural, en la que destacan productos como los higos, los quesos de cabra y el pescado. Algunos de los platos típicos que podrás degustar durante tu estancia son:

• Gardianne de taureau (Guiso de toro): Se trata de un guiso de carne hecha a fuego lento, donde se corta en trozos y se aliña con aceite de oliva. Lleva verduras, aceitunas negras, ajo y vino tinto lo que da carácter de guiso.
• Rouille de Aigues Mortes: Plato típico de la ciudad, elaborada con pulpo, papas y alioli.
• Brandada de Nimes: Bacalao desalado y deshilachado mezclado con aceite de oliva a la que se añade ajo, puré de papas, acompañado de ensalada o verduras. Esta combinación la suelen usar de aperitivo untándola en pan.
• Pastis: Tipico licro de Marsella, compuesto por anís, alcohol de 90° y, aromatizado con vainilla y canela.
• La trufa negra del Tricastin
• Aceite de oliva: En Provenza hay cinco aceites con denominación de origen (AOC): Nyons, Aix-en-Provence, Haute-Provence, Vallée-des-Baux y Niza.
• Quesos de cabra: Te recomendamos cuatro: Picodon: queso de cabra tradicional de Provenza, fabricado artesanalmente y vendido directamente en los mercados provenzales.
• Banon: queso redondo envuelto en hojas de castaño. Brousse du Le Rove: queso fresco que lleva el nombre de un pequeño pueblo cerca de Marsella y el  Tomes: quesos frescos que pueden encontrar por toda la región.

Si te gusta el turismo de playa, Marsella no dispone de extensas playas de arena fina pues predominan las calas. Las de las islas Frioul son preciosas, agua cristalina y perfectas para hacer snorkel. Presta atención a nuestra sugerencia que detallamos a continuación.

• Calanque de Port Pin: La Calanque de Port Pin es una de las más cercanas al pueblo de Cassis. Cuenta con playas de piedras y arena fina, de agua turquesa, donde se puedes llegar en menos de una hora de camino. No olvides tu agua y tu crema solar, es un parque natural, y no se vende nada ahí. Podrás volver en barco si no quieres caminar, aunque normalmente se suele tomar una ida y vuelta desde el pueblo. 
• Cala de Port Miou: Es una de las calanques de más fácil acceso desde el pueblo de Cassis, aunque eso no quiere decir que te demores al menos una hora en llegar a ella, para poder disfrutar de un buen chapuzón en la playa Bleu, de piedras blancas y agua fría.
• Calanca de Morgiou: Catalogado como el pequeño rincón del paraíso ya que posee arena dorada y aguas turquesas, ideal para relajarse. Ubicado en un arroyo en Marsella, cerca del Puerto de Morgiou.
• Islas del Frioul: Corresponde a un archipiélago de 4 islas: La isla de If, Pomegues, Ratonneau y Tibooulen, que se encuentran a unos kilómetros de la costa de Marsella. Hay barcos que te ofrecen el tour de recorrer las cuatro, con tiempo entre cada una para visitar y por supuesto bañarte y descansar. En ellas encontrarás caletas aisladas, playas muy bonitas, con agua cristalina.

Si eres amante de las compras, presta atención a nuestra sugerencia que detallamos a continuación.

• Les Terrasses du Port: Este gigantesco y moderno centro comercial merece más de una visita. Con sus 160 tiendas y una terraza abierta al mar, son verdaderos templos del shopping que alían cultura, ocio, comercio y restauración de la ciudad. ¡Un imperdible!
• Le Panier: Ubicado en el centro de la ciudad antigua, entre un laberinto de callecitas, fachadas coloridas, tiendas antiguas, boutiques de ropa vintage y nuevos diseñadores, este barrio es el lugar ideal para los amantes del shopping. Encontrarás ¡De todo!